La importancia del creador hace que a veces se olvide al dibujante durante casi las primeras dos décadas, Harry G. Peter, que tenía un estilo bastante bizarro y al que debemos gran parte de la iconografía del personaje y sus polémicas,  según algunos, escenas de bondage.

Otros capítulos están dedicados a los cómics del personaje, uno de los que tiene una trajectoria más longeva dentro del cómic book americano  (recordemos que los primeros datan de principio de los años  40).  A lo largo del tiempo las aventuras de WonderWoman han tenido diferentes enfoques: luchadora contra los nazis en la segunda guerra mundial, romántica en la década de los 50, parte de la Liga de la Justicia en los 60,e incluso una etapa en la que colgó el traje y vivía aventuras más terrenales como una mujer normal sin poderes, etc… siempre teniendo una gran popularidad que se refleja en todo tipo de merchandaising del que en el libro aparecen numerosos ejemplos (muñecas, dispensadores de caramelos Pez, teléfonos, disfraces…)